El verano exige recetas muy hidratantes pero también apetitosas. Cuando se habla de esta temporada se disparan las ensaladas, pero no es solo lo que debe primar en la mesa porque suelen aburrir hasta el cansancio.

Una receta que puede resultar muy económica y digerible es la crema de zanahorias y naranjas.

Para hacerla, cuece 5 zanahorias de tamaña mediano con caldo de pollo, al que habrás añadido sal y un poco de pimienta. Una vez tiernas, agrégales un quesito fresco y el zumo de tres naranjas. Tritura todo en la batidora brevemente, y ya. La puedes servir fría o caliente, aunque mi consejo es que pongas en el frigorífico y una vez a esta temperatura, servir en la cena o en la comida como primer plato. En la cena puedes comerla solo acompañada con una rodaja de pan.

Muchas son las personas que padecen de acidez. Esta causa un fuerte ardor en el estómago luego de ingerir algunos alimentos.

La acidez es frecuente, y las personas que la padecen regularmente no acuden al médico, sino que la combaten con medicamentos antiácidos. No todas las personas asimilan algunos alimentos de la misma manera.

Lo mejor es tomar algunas precauciones. Se puede evitar comer en demasía, y sobre todo comidas cargadas de grasas, abundantes salsas y especias. Trata de no consumir bebidas en las comidas y controlar la ingestión de café y de chocolate.

Algo importante es no acostarse después de las comidas. Resulta muy conveniente dar un pequeño paseo, aunque sea alrededor de la casa. Esta corta caminata favorece la buena digestión.

 


A diario en cada hogar se realiza una tarea muy usual, que no a todas les gusta. Los trucos culinarios pueden hacer de esta tarea un rato ameno, con el fin de deslumbrar al resto de la familia.

Esta es una tarea cotidiana que no exige sexo para ser efectuada. Consiste en hacer más placentera y agradable la labor de cocinar. Poniendo en práctica varias combinaciones de alimentos, bien balanceados, puede ayudar a una sabrosa y sana alimentación.

Empleando carnes, verduras, pastas cereales, con el buen sazón de los condimentos ya sean naturales o artificiales, se puede llegar a la confección de platos especiales que impresionen a todos en el hogar.

Aplica todas las mañas posibles para hacer de tu función en la cocina toda una profesión. Decora los platos a tu gusto y acompáñalos con jugos refrescantes o con buenos vinos que ayuden al buen apetito y digestión, además esto es muy agradable a la vista e invita a probar el menú.

El abuso del azúcar a la hora de comer, es extremadamente peligroso para el organismo. Ella, a diferencia de otros alimentos, se convierte en glucosa rápidamente y pasa a la sangre.

Ella es una sustancia químicamente pura, cargada de carbohidratos. Carece de vitaminas, minerales, grasas y proteínas. Su punto de vista nutricional es muy bajo. Ingerirla de forma continuada en grandes dosis provoca el exceso de peso, y por consiguiente amenaza de peligrosas enfermedades.

Si consumes mucha azúcar, esta va dirigida a destruir tu cuerpo. Desde provocar caries dentales hasta problemas cardiovasculares, hipertensión arterial y arterioesclerosis. Estas son las consecuencias de ese mal hábito, el que con mucho empeño lograrías erradicarlo.

El consumo sistemático de dulces caseros en los postres sería mucho más sabroso y saludable si su contenido de azúcar es prudencial. La educación debe comenzar por casa. Emplea menos azúcar en todos los preparados. El sentido del gusto es uno de los más adaptables y pronto se acostumbra al nuevo sabor.