Para cada especialista en sexología, recibir en sus consultas personas lamentándose de que el amor acaba, es una medida del daño que han hecho las telenovelas y películas románticas.
El amor de pareja, pasa por etapas, y se acaba la fuerza y la pasión de los primeros tiempos para dar paso a otras cualidades. Lo que sucede es que los humanos no quieren comprender esto y se desbocan en lamentaciones. Y en esas quejas, es que ocurre a veces la desintegración y la búsqueda de otra pasión igual.
Los que anhelan siempre el amor de telenovelas nunca serán felices porque esa búsqueda constante resquebraja la autoestima. En todas las relaciones hay un momento en que la idealización da paso a la realidad y hay que saber vivir con ella.
Si bien el amor a los padres, a los hijos, a los amigos, al trabajo.. en fin, el amor puede es duradero en estos casos, el de la pareja se diferencia en que sí sufre cambios, y esos cambios están dados sobre todo por el sexo que es el que respalda la pasión erótica de una relación de este tipo.
Comprender esta realidad es un reto, pero también una necesidad para pensar positivamente en que el amor eterno de los cuentos.. no es real, y poner los pies en la tierra ha resultado ser más difícil de lo que se piensa.
hola muy buena reflexion las telenovelas son los culebrones que ponen a las mujeres idiotas es mi criterio
no creo que siempre acabe, a veces solo se transforma
se acaba en una semana
ni las rocas son eternas porque el viento y la lluvia las transforman
se me parece al tíyulo de una canción
mi mujer es de estas tías