Después de tanto y tanto buscar un hombre para que fuera mi pareja por un tiempo, solo me quedó un recurso que encontré como consejo en internet: lanzarme a la lectura porno.

Sin ponerme a pensar mucho en esto me fui a una librería y busqué el estante de los libros morbosos. No había nadie,  pero mientras hojeaba un libro se me acercó un chico guapísimo y me dijo que el libro estaba buenísimo. Como casi infarto, le pedí que me diera un adelanto de lo que podría encontrar en su lectura, y..¿no adivinan lo que pasó? Imaginó que era un adelanto de hechos y me invitó a un café. Y sí..¡acepté!, aunque, sin quererlo mucho, ya me estaba lanzando a una aventura sexual.

El día terminó como imaginan. ¡Qué manera de disfrutar! No lo he visto más, pero se llama Joseps, digo, eso fue lo que me dijo, y aunque no sepa más de él, aprendí una lección única: para conseguir, hoy, chicas, hay que ser atrevidas, dejar la cara de monjita para los padres y lanzarse a lo que sea. Y algo más, si se encuentran con Joseps, dejen que lleve la iniciativa, es un maestro como pocos.

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2 COMMENTS

  1. 😉 si se me aparece a mi lo atrapo en 5 minutos

  2. josep? yo conozco un chico llamado así y es raton de librerías, será el tuyo’ PELO RUBIO, 180, cara de niñato bueno

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