Si lo que deseas es solo una relación ocasional, corta y sin dejar huella, existen algunas reglas especiales para estos casos. Seas hombre o mujer tienes que andar con precaución, y las páginas de contacto te permiten toda la privacidad que seas capaz de mantener.
Somos nosotros los que echamos a perder la intimidad dejando tras de nuestros mensajes indicios que nos delatan. Una relación ocasional no debe ser más que eso, y la discreción se impone como medida de vital importancia.
Tus datos necesitan estar protegidos. No vamos a decir que todas las personas son morbosas ni pueden convertirse en enemigos de la noche a la mañana, pero ¿qué pierdes con ser discreto/a? Las relaciones de pareja presentadas en sitios públicos, son para los famosos, ellos viven de esa publicidad que siempre les conviene. A nosotros, lo que nos importa es mantener una imagen que delate solo lo necesario, las relaciones sexuales o de otro tipo que quieras tener para disfrutar, forman parte de tu intimidad que nunca debes violar.
Ser cauteloso es una virtud, miles de personas con vidas conocidas del público quisieran dar una fortuna, con tal de mantener su privacidad, mnientras, otros que lo han logrado, son mejor enjuiciados y gozan de más privilegios.
Te pongo un claro ejemplo: aquellos que han salido del armario se han convertido en el cóctel codiciado de los chismes y el humor intrigante de los amigos, conocidos, y si son famosos, la prensa no para de traerlos y llevarlos a su antojo. Los que han cometido infidelidad y es conocida su relación, se han visto sufriendo muchas censuras incluso de quienes también son infieles pero lo callan. Estos son los más peligrosos en ese momento, con tal de enmascarar “su pecado”, no paran de cotillear del otro para ofrecer una imagen de perfección de la que carecen.
La primera palabra de la regla, como ves, es precaución, la segunda precaución, y la tercera, ¿hace falta que te la repita?