relaciones sexuales

5 formas de usar el vibrador en pareja

Muchos hombres piensan que los vibradores solo tienen como función ser usados por las mujeres para masturbarse, pero nada más lejos de la realidad. Un vibrador puede tener tantos usos como tu imaginación pueda concebir. Claro que lo utilizan las mujeres para darse placer en solitario, pero también podéis usar el vibrador en pareja para conseguir un mayor placer.

Si te gustaría introducir el vibrador en vuestros juegos sexuales de pareja pero no se te ocurre cómo, aquí os dejamos 5 formas de usar el vibrador en pareja y disfrutar ambos como nunca:

1. Para acelerar los preliminares

Los vibradores tienen la capacidad de estimular sexualmente a una mujer de manera muy rápida y poderosa. De esta manera, en caso de querer tener sexo pero tener poco tiempo, puede funcionar muy bien para reducir el tiempo de los preliminares. Simplemente se trata frotar el vibrador por toda la vulva, especialmente el clítoris, de la mujer al mismo tiempo que se llevan a cabo besos y caricias.

2. Para estimular el clítoris durante el coito

A muchas mujeres les cuesta llevar al orgasmo solamente con la estimulación coital. Esto es debido a que la mayoría de posturas no permiten que el pene frote mucho el clítoris, que es donde están la mayoría de las terminaciones nerviosas y donde es más fácil que ellas sientan el máximo placer. Un vibrador puede solucionar esto, simplemente acariciando el clítoris con él al mismo tiempo que el hombre penetra a la mujer vaginalmente.

3. Para penetrar a la mujer durante el cunnilingus

Es habitual introducir uno o varios dedos en la vagina de la mujer al mismo tiempo que se estimula el clítoris con la boca, de manera que se intensifica el placer. ¿Cómo podríamos intensificarlo todavía más? Introduciendo en la vagina un vibrador con forma fálica en lugar de los dedos. ¡El placer será indescriptible!

4. Para subir la intensidad de una felación

Pero un vibrador también puede ayudar de varias formas a que ellos tengan más placer. Por ejemplo, ella puede ponerlo en su mejilla mientras realiza una felación al hombre. De esta manera, además del movimiento que ella realice con sus labios y su lengua, el pene también recibirá la vibración del aparato a través de la piel de la cara de ella y la sensación será mucho más intensa y placentera.

5. Para estimular el punto G masculino

Podemos buscar un vibrador pequeño (los existen especializados o como versión “de viaje” para mujeres) y jugar a experimentar con el punto G masculino. Está más que demostrado que estimularlo durante el coito o durante una felación/masturbación puede intensificar en gran medida el placer del orgasmo. Se trataría de que la mujer introduzca en el ano del hombre el pequeño aparato al mismo tiempo que éste la penetra o ella estimula su pene de otras maneras.

Consigue un trío inolvidable con estos consejos

Un trío sexual es una de esas prácticas que si no se planifica bien puede acabar en desastre. Normalmente la imaginación supera a la realidad, cuando se trata de tener sexo con otras dos personas a la vez, pero normalmente es por falta de experiencia y por no haber sido bien aconsejados previamente.

Si te interesa hacer un trío, tanto con tu pareja y otra persona como con dos personas nuevas, debes tener presentes unas normas básicas que harán que la experiencia sea mucho más placentera, cómoda y segura para todos. Y, si la primera vez falla alto, tómatelo como un aprendizaje para mejorar a la siguiente. En los tríos, como en todo tipo de sexo, la excelencia se alcanza con la práctica.

Si vas a hacer un trío con tu pareja y alguien más…

– Ambos debéis estar 100% seguros de que queréis hacerlo, tener plena confianza el uno en el otro y estar disfrutando de una relación sólida y plena.

– Es importante marcar unas reglas previamente sobre lo que le parece bien hacer a cada uno y lo que no. Las prácticas prohibidas deberán respetarse sin ninguna excepción.

– Para decidir si hacéis el trío con otro hombre u otra mujer deberéis explorar en una conversación las fantasías de ambos y llegar a un acuerdo, no hay una opción mejor que otra.

– Todos os debéis sentir integrados y disfrutar, por lo que es importante que no dejes de lado ni a tu pareja ni a la otra persona. Sin embargo, es de prioridad máxima que tu pareja se sienta atendida por ti, a no ser que acordéis lo contrario.

Seguridad ante todo: los tríos necesitan un extra de precaución, por lo que habrá que cambiar el condón cada vez que se penetre a una persona nueva y lavar los juguetes sexuales entre un uso y otro. Puede parecer un poco rollo, pero es la única manera de asegurar una experiencia sana.

Si vas a hacer un trío con dos personas nuevas…

– Puedes buscar gente interesada en hacer un trío de muchas maneras, pero las más rápidas posiblemente sean una página web de contactos sensuales como FuegodeVida o un club de swingers.

– Si lo haces con una pareja ya establecida, asegúrate de que tienen experiencia o, al menos, que están 100% seguros de hacerlo, por evitar problemas más adelante.

– No te centres solo en la persona que más te guste, lo más importante en un trío es que todos los participantes lo disfruten, así que intenta alternar tus atenciones siempre que puedas.

– Por supuesto las normas de higiene y seguridad que hemos explicado antes también se aplican aquí, incluso más al ser dos las personas que no conoces.

Bajo deseo sexual en los hombres

Se suele pensar que los hombres siempre están dispuestos, que tienen un alto deseo sexual de manera permanente. Por el contrario, las mujeres suelen ser acusadas de tener un bajo deseo sexual y no facilitar los encuentros sexuales en ningún caso. Por supuesto, es bien sabido que esto no va unido al sexo sino a personas en particular, aunque los estereotipos siguen estando ahí. Sin embargo, recientemente se empieza a ver una tendencia a la inversa de lo que siempre se ha creído: los hombres tienen un bajo deseo sexual. Pero, ¿es esto posible?

Antes que nada, hay que tener en cuenta que algunos factores externos pueden afectar al deseo sexual y, en estos casos, el bajo deseo sexual poco o nada tendría que ver con la voluntad de la persona. Esto puede ocurrir tomando ciertos medicamentos, abusando de ellos, en estados de depresión u otras condiciones médicas. Además, es habitual que disminuya el deseo sexual a partir de los 50 años a causa de una bajada en la testosterona. En casos de disfunción eréctil también puede ir asociada una disminución del deseo sexual, siendo algo más psicológico que físico.

Pero hablamos de hombres sanos, jóvenes y que tienen un deseo sexual más bajo que el de sus parejas. ¿Por qué puede estar ocurriendo esto? Los estudios apuntan a hombres de entre 30 y 40 años de edad, que no tienen ninguna condición médica que disminuya su deseo sexual y que, sin motivo aparente, buscan cada vez menos a sus parejas para tener sexo y disfrutar de su sexualidad. No es un tema que salga a conversación en el ámbito social, pues la mayoría de hombres temen ver perjudicada su imagen y su “masculinidad”. Sin embargo, de hablarse más del tema tal vez sería más sencillo encontrar la causa y el origen de esta situación que estamos viviendo.

Los profesionales del tema hacen diferentes recomendaciones para los hombres que se encuentren en situación de sentir un bajo deseo sexual, siendo la primera de ellas descartar un problema médico.

– Análisis de los niveles hormonales para descartar desajustes.
– Adquirir hábitos de alimentación saludable (dando prioridad a frutas y verduras).
– Practicar ejercicio o deporte de algún tipo varias veces a la semana.
– Reducir el nivel de estrés en la vida cotidiana.
– Llevar a cabo prácticas sexuales tántricas, dando prioridad a las caricias, los besos y las sensaciones, sin prisa y sin el objetivo de conseguir la penetración y/o el orgasmo.

Trucos para hacer un cunnilingus perfecto

Aprender a hacerle un cunnilingus perfecto a una mujer es asegurar su satisfacción en la cama y que siempre vuelva a por más. No hay ninguna otra práctica que proporcione tanto placer a una mujer, dominar la técnica puede convertirte en un amante excelente con el que todas querrán repetir.

Sin embargo, la mayoría de hombres creen que saben hacer bien un cunnilingus o, incluso, que su cunnilingus es perfecto, y no pueden estar más equivocados. Algunas mujeres no se atreven a rectificar los errores que cometen sus parejas al hacerles un cunnilingus, por vergüenza o falta de motivación. Es por esto que vamos a dar las claves y trucos para hacer un cunnilingus perfecto y que consigáis perfeccionar esta técnica al máximo:

La preparación

El cunnilingus no es un entrante, el sexo oral requiere unos preliminares igual que el coito, para asegurar una satisfacción plena. Dedica tiempo a besos, caricias y roces varios para asegurarte de que ella esté excitada previamente. Se debería dedicar, al menos, 10 minutos a poner a tono a la chica para que el cunnilingus que vendrá sea perfecto. Por supuesto, es importante elegir un sitio tranquilo y agradable y que ella busque la postura más cómoda posible.

El ritmo

Una vez ella ya esté cómoda y muy excitada, es hora de dirigirte a su sexo y empezar a darle besos y suaves lametones, tanto al clítoris como a los labios, las ingles y toda la zona. Puestos ya en materia, debes recordar darle gran protagonismo al clítoris (pero no total) e ir cambiando de dirección y de ritmo. Ir de menor ritmo a mayor siempre irá bien, pero si quieres que el placer sea inigualable, puedes parar cuando veas que está cerca de llegar y volver a empezar. Se volverá loca y recordará mucho tiempo ese cunnilingus perfecto.

Los dedos

Utilizar las manos no es imprescindible, pero según con qué chica puede ser un plus muy bien recibido. Cuando veas que ya está muy excitada y disfrutando el cunnilingus al máximo, puedes introducir uno o dos dedos en su vagina para masturbarle y ayudar a aumentar el placer, siempre sin detener el sexo oral, por supuesto. Y, lo más importante, es no parar por nada del mundo cuando esté próximo el orgasmo.

Cunnilingus perfecto

Los errores

Dedicar poco tiempo a los preliminares o hacer movimientos repetitivos y monótonos con la lengua son dos de los errores más habituales que te alejan del cunnilingus perfecto. Pero otros son utilizar los dientes, rasparle sin querer con una barba de pocos días o no saber interpretar que está cerca del orgasmo. Es muy importante observarle y analizar sus reacciones para saber en qué punto de excitación está y siempre, ante la duda, más vale preguntar que estropear el que podría llegar a ser el cunnilingus perfecto.