homosexuales

Excitacion Sexual

Si aún no has encontrado la manera de saber qué te excita cuando tu pareja quiere sexo y tú estás desinhibida, aquí te muestro una encuesta que será perfecta para de cubrir tu propia libido.

Piensa en cada una de estas situaciones, y si te invade un leve escalofrío de placer por el cuerpo o hasta te sientes con cierta humedad vaginal, ya sabes a qué atenerte. En internet se encuentran tanto películas, vídeos, fotos, dibujos, pinturas y artículos que tratan estos hechos y sirven para que, sin que nadie lo sepa,   puedas motivasrte más sexualmente.

Cuando se acerque la hora de tener sexo con tu chico, busca ver alguna de estas situaciones y si no es posible, imagínalas con mucho deseo. Verás cómo te vas calentando y puedes complacerle sin que tu relación sentimental se vea dañada por algunos problemas de abstinencia sexual que nos ataca a veces por el estrés diario.

– Fotos de penes, vaginas, senos, culos, cinturas, piernas, muslos, bocas o cuellos.

– Un desnudo erótico en una película, una foto, una pintura, un dibujo o en vivo.

– Dos o varias mujeres desnudas o varios hombres desnudos.

– Una mujer o un hombre masturbándose.mujer masturbándose

– Parejas teniendo sexo fuerte.

– Parejas teniendo sexo erótico, con música de fondo y muchas caricias, besos y pasión.

– Espectáculo de bailarines eróticos.

– Parejas de un mismo sexo teniendo relaciones homosexuales.

– Una orgía donde haya intercambio de parejas, las relaciones sexuales sean a la vista de todos y no haya limitación en la privacidad.

Uno de los grandes conflictos que sufren hoy miles de jóvenes, radica en cómo salir del armario sin que sus amistades, familia o compañeros no se manifiesten en su contra.

Los que así se encuentran están en una situación de riesgo social, y se han percatado de que necesitan insertarse entre todos sin inhibiciones pero tienen sus dudas de cómo serán aceptados, y por supuesto, tienen razón. Aún la humanidad no se  ha quitado la venda de los ojos sobre la homosexualidad y la convivencia con parejas gays.

Ante esta pregunta, hay muchas respuestas. Una está clara, manifestarse sin miedos y que los demás lo admitan o no, no será su problema. Hay otro modo, que es ir dejando caer poco a poco sus inclinaciones. El primero, exige valentía y mucha determinación. El segundo, a pesar de mostrarse más cauteloso, también necesita mucha valentía. ¿Por qué? Es sencillo, porque una vez que los demás de su entorno familiar o social descubran sus sentimientos homosexuales, tratarán por todos los medios de  censurar y evitar esta conducta, si es que no la aprueban. Se necesitará, como ya he mencionado, mucho aplomo para enfrentar a los enemigos de la homosexualidad.

Entonces, ¿cuál es la mejor manera de salir del armario? El consejo está claro: decir de una vez lo que siente o manifestarse como tal, las decisiones a medias nunca serán buenas y exigirán un esfuerzo mayor para que sea aceptado.

Francia se debate entre el aceptar o no los matrimonios gays, pero de algo sí estamos seguros y es que los homosexuales están a la carta en todo el mundo. Negarlo es ir contra el desarrollo de nuestro tiempo.

La iglesia sigue debatiendo el tema y no acepta la homosexualidad, algunos gobiernos la prohíben, otros no consienten el matrimonio entre homosexuales, pero la mayoría de la población ya acepta este proceder y muchos salen del armario, por fin, después de tantas censuras.

Si de algo sí estamos convencidos es que contra el impulso sexual no se puede ir. Mientras que luchamos contra los mayores problemas de drogas, robos, corrupción; la homosexualidad no es ningún problema para nadie ni atenta contra  la comunidad. Solo son las viejas ideas inculcadas por la religión las que desgraciadamente, aún imperan y destruyen o intentan destruir algo tan sano como es el amor entre dos personas. Además, una vez que una pareja homosexual entra en una habitación, el mundo está muy lejos de ellos. Lo mismo que sucede con una pareja de enamorados heterosexuales.

El amor llega sin que nadie lo busque y cuando hay atracción entre dos personas de un mismo sexo y son correspondidos, ni la familia ni la sociedad ni los gobiernos pueden disolver esa relación. Ya no hay parejas que tengan  que sufrir por no poder estar juntos al negarles su condición de amantes, al menos, en los países civilizados.

¿Qué queda entonces para los gays? Seguir luchando por sus derechos y que su intimidad sea respetada, porque no hay manera de hacer ver que el amor sea depravado cuando dos se aman y se cuidan uno al otro. La sociedad tiene que aceptar de una vez que hay muchas más actitudes humanas que sí hacen daño al resto del mundo. Los homosexuales no son de este grupo, es hora ya de dejarlos en paz.

No son tan escasos los homosexuales en el mundo, las cifras indican que la homosexualidad se ha disparado como nunca porque ya no temen expresar lo que sienten, y varios Estados incluso les permiten que realicen matrimonios, adopciones de niños y no son recriminados por la sociedad.

Entre las cifras más importantes que se valoran, están las de los que no ocultan sus inclinaciones sexuales  hacia su propio sexo, en este caso la cifra ya alcanza un 11%. Por supuesto que pueden pensar que es mínima, pero no lo es, si valoramos que en muchos países del Medio Oriente, África y Asia, estas relaciones de pareja aún son censuradas por buena parte de la población, y se mantienen ocultos los sentimientos. Por lo tanto, no se incluyen en esta cifra.

Los países con más fuerza en las religiones son las que han demostrado menos cantidad de homosexuales, aunque donde impera  el catolicismo han abierto sus puertas a los creyentes gays y la mayoría de los demás fieles no censuran estas relaciones.