Casadas Infieles

¿Te has preguntado alguna vez por qué una mujer casada es infiel? La respuesta, evidentemente, no es única, sino que hay múltiples motivos que pueden llevar a una chica hacia la infidelidad. En España, uno de los países con mayor número de deslices por metro cuadrado, se han hecho un gran número de estudios para descubrir el porqué.

¿Quieres saber las principales razones por las que las mujeres casadas son infieles?

#1 Insatisfacción sexual

Aunque más que insatisfacción, deberíamos describirlo como falta de ganas. Muchas mujeres casadas buscan en los brazos de otro hombre el interés que sus propios maridos no tienen en ellas. Así, más que insatisfacción, lo que castigan es el desinterés.

#2 Experiencias nuevas

También hay un buen porcentaje de esto, claro que sí. Muchas mujeres, al igual que los hombres, buscan nuevas formas de placer para escapar de la rutina. ¡Hasta el punto de llegar a verlo como una asignatura pendiente!

#3 En busca del deseo

Muy relacionado con el primer punto, la falta de deseo —ya no solo de interés— hace que muchas chicas prefieran un amante a su marido; algo que no es extraño que se relacione con esas mariposillas de inicio de relación que pueden complicar y cronificar más de una infidelidad.

#4 Sexo por venganza

Mucho más común de lo que parece: el “si tú lo has hecho, yo también” aplicado al territorio de la cama es algo muy habitual. No siempre tiene que ser para castigar un desliz de sus maridos, sino también una traición de cualquier tipo: maridos volcados en el trabajo, en sus hobbies o ajenos a la vida de pareja son los objetivos más habituales.

#5 Cuando surge, surge

Las vacaciones, los viajes de trabajo o las salidas de fin de semana sin la pareja son los momentos perfectos de esa infidelidad que ocurre porque puede ser. Sin embargo, hay que tener presente que todas estas ocurren por algo más. No es que jamás una chica haya tenido un desliz porque se ha presentado la oportunidad, pero todas ellas suelen tener un componente mucho más profundo que, a menudo, no advertimos.

Como ves, estas son las cinco situaciones más habituales por las que las mujeres casadas pero infieles disfrutan de relaciones alternativas a las habituales. ¡Una experiencia de alto riesgo y mucho adrenalina!

Para los hombres, la infidelidad es tan cotidiana como cualquier otra actividad diaria, tal parece que la naturaleza nos dio ese don o esa capacidad orgásmica  de llevar varias relaciones de pareja.

Todo lo que hacemos nos sabe a gloria, ¡vale el símil para demostrar que lo pasamos genial con cada nueva conquista!, y con tantas mujeres para atender, a veces, nos descuidamos. ¿Qué sucede entonces? Lo que siempre nos trae problemas,  se enteran de que andamos con  varias faldas a la vez y hay que plantar cara al problema.

De la forma que lo resolvéis no es lo que interesa ahora, pues a cada cual le toca enfrentar su propio problema con dignidad, pero todo eso pudiera evitarse si sabéis llevar cada relación con cautela. Claro, si vamos por ahí de don juan ya sabremos qué puede suceder, por eso es mejor aparentar una cosa y ser otra, que el pecado que ven ellas no tiene nada que ver con la diversión que nosotros gozamos.

Presten atención y sigan estas tres normas, les aseguro de que todo será más divertido y para nada se interrumpirá la vida que llevan porque no habrá problemas al ser descubierto:

1- Jamás cambieis tu planificación diaria, salvo casos excepcionales y bien justificados con alguna  mentira. Vamos, que si nunca fuisteis al fútbol imposible que de un día para otro quieras ir a ver un partido y hasta repetir, ¿quién se cree semejante embuste?

2- Programa tus citas sexuales en lugares privados, a menudo el mayor error en tratar de presumir de un ligue fenomenal para los demás nos envidien, y eso es un error. ¿Acaso no te sientes satisfecho tú mismo  con tener en los brazos semejante chica? Al querer presumir, lo estamais publicando en el periódico digital que viaja la velocidad de internet.

3- Advierte siempre a cada una de tus parejas ocasionales que tú las deseas pero que no pueden traspasar la línea que les permitas. Eso quiere decir muchas cosas, cero llamadas, cero buscar, cero comentar ni difundir la relación y cero futuro. Si notas, aunque solo sea una pizca de atrevimiento, rompe de  inmediato, aunque te guste mucho la chica, hay miles mejores que ella.

Las relaciones de pareja son un gran desafío para todos, sabemos cuándo empieza pero desconocemos hasta cuándo llegará la magia que los une. ¿Cuál es el problema? El aburrimiento, ese flagelo del que no escapa nadie.

Ante el deseo de contar siempre con una pareja que guste y que no aburra, que motive cada encuentro con nuevas experiencias cargadas de placer y diversión, hay una manera excelente de marcar el ritmo, me refiero a las relaciones sexuales esporádicas.

Según la psicóloga Marta María Lozano, en su libro “Toda la verdad sobre el sexo”, la única manera de mantener el entusiasmo por una persona determinada es verla cada cierto tiempo y disfrutar del sexo como si fuera ese el único encuentro entre los dos. O el último, sacando chispas al  disfrute sexual adoptando todo tipo de placeres. Antes de sentir aburrimiento, se separan y hasta que se vuelvan a ver solo cuando ya necesitan de nuevo el encuentro, reviviendo cada minuto con la misma ilusión de la primera vez.

Estas parejas son cómplices en el sexo, muchas veces tienen otras relaciones, son casados o con compromisos firmes de pareja, pero viven más intensamente con quien ven solo varias veces, incluso, conozco algunas que los encuentros se dan una media de solo dos o tres anuales, sin mediar ninguna otra relación entre ambos y disfrutan la más feliz experiencia sexual.

Conocer a una persona en una cafetería, en el lugar de las vacaciones, en el metro o en una fiesta, nos permite disfrutar del sexit, al terminar ese encuentro en sexo. Y, ¿qué tal si se intercambian números de teléfono o cuenta de correos? Por supuesto, solo gozaron a tope, y quedaron con ganas. Al paso del tiempo, uno de los dos recibe un mensaje para verse de nuevo, ¡quién es capaz de negarse! Y así sucede cada cierto tiempo, cuando ya menos se lo imaginan.

Excitacion Sexual

Si aún no has encontrado la manera de saber qué te excita cuando tu pareja quiere sexo y tú estás desinhibida, aquí te muestro una encuesta que será perfecta para de cubrir tu propia libido.

Piensa en cada una de estas situaciones, y si te invade un leve escalofrío de placer por el cuerpo o hasta te sientes con cierta humedad vaginal, ya sabes a qué atenerte. En internet se encuentran tanto películas, vídeos, fotos, dibujos, pinturas y artículos que tratan estos hechos y sirven para que, sin que nadie lo sepa,   puedas motivasrte más sexualmente.

Cuando se acerque la hora de tener sexo con tu chico, busca ver alguna de estas situaciones y si no es posible, imagínalas con mucho deseo. Verás cómo te vas calentando y puedes complacerle sin que tu relación sentimental se vea dañada por algunos problemas de abstinencia sexual que nos ataca a veces por el estrés diario.

– Fotos de penes, vaginas, senos, culos, cinturas, piernas, muslos, bocas o cuellos.

– Un desnudo erótico en una película, una foto, una pintura, un dibujo o en vivo.

– Dos o varias mujeres desnudas o varios hombres desnudos.

– Una mujer o un hombre masturbándose.mujer masturbándose

– Parejas teniendo sexo fuerte.

– Parejas teniendo sexo erótico, con música de fondo y muchas caricias, besos y pasión.

– Espectáculo de bailarines eróticos.

– Parejas de un mismo sexo teniendo relaciones homosexuales.

– Una orgía donde haya intercambio de parejas, las relaciones sexuales sean a la vista de todos y no haya limitación en la privacidad.