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Orgasmo fingido
Fingir orgasmos para hacer sentir bien a tu pareja es un error común.

Siempre que practicamos sexo lo hacemos con un fin y ese es llegar al orgasmo, se puede llegar o no,  pero siempre se disfruta intentándolo, las mujeres lo tienen un poquito más difícil que los hombres para alcanzar el clímax.

No es necesario llegar al orgasmo para tener una relación sexual satisfactoria, se puede disfrutar mucho y no llegar a tenerlo, pero es verdad que la mayoría de parejas se frustran si la otra parte no llega a tenerlo, por eso muchas veces las mujeres u hombres fingen tener un orgasmo.

Cuando llegar al clímax es  la única meta para tu pareja y sientes que se siente feliz con ello, sin quererlo conviertes por costumbre fingir el orgasmo para satisfacer tanto a hombres como a mujeres, para que se sientan mejor con ellos mismos, para darles la satisfacción de que lo han hecho bien y que te gusta.

Uno de los recursos más utilizados para fingir un orgasmo es el sonido, gemidos y ruidos suaves para excitar a tu pareja y hacer ver que tu también estás muy excitado, que vas a correrte ya. Todo esto acompañado de movimientos excitantes y placenteros para que tu pareja pueda ver que te esta gustando mucho y que te queda nada, y así poder llegar a correros juntos.

Puede ser un error fingir más orgasmos de los debidos, ya que con ello estás dando a entender a tu pareja que lo está haciendo todo bien, que te gusta lo que hacéis y que sientes placer, cuando en realidad no es así. Sí que te gusta el acto sexual pero no te da tiempo a acabar o no vas a llegar  a tener el orgasmo, así que si no llegas a saborear el clímax en ese momento no te preocupes, y coméntalo con tu pareja para que la próxima vez os podáis esforzar los dos un poco más.

Aunque normalmente son más las mujeres que fingen orgasmos, según un informe de Women’s Health, el 61% de las españolas ha fingido un orgasmo frente a un 21% de los hombres que han fingido. El hombre cuando tienen un orgasmo eyacula por lo tanto es muy difícil que pueda fingir un orgasmo, por lo que cuando finge un orgasmo tiene que estar utilizando preservativo para que la mujer no se percate de si ha eyaculado o no.

Los hombres fingen orgasmos ya que muchas veces se sienten presionados al saber que tienen más facilidad de llegar para llegar a  él, y les preocupa que su pareja no se siente deseada o querida al saber que no le provocó llegar al clímax.

Fingir un orgasmo tanto en hombres como mujeres está encaminado a hacer sentir bien a tu pareja, hacerla sentir que es deseada. Deberíamos cambiar esta manera de pensar y sentirnos igual de bien sin llegar al orgasmo, podemos disfrutar de la relación sexual casi igual de placentera.

 

Fingir un orgasmo

 

 

 

Muñeca Hinchable

La vida moderna te exige vivir solo, y esto es perfecto, ¡nada de compromisos ni cadenas! El único problema es que la cama está vacía y cuando llega la hora de follar, echas en falta un cuerpo caliente que te dé placer.

En ese momento intentas tirar de tu agenda o bien tratas de conocer gente nueva en webs de citas como Fuego de Vida. En esta página de contactos consigues chicas para sexo de una noche y descargas toda la testosterona. Otra cosa es cuando ni de una manera ni de otra consigues ligar,  ¿qué te queda entonces? La solución perfecta, los juguetes eróticos, que ayudan a gozar del  sexo en solitario.

A la hora elegir uno, puedes seguir esta tipología para que te sea más sencillo decantarte y descubrir hasta dónde han llegado los creadores del juguete sexual masculino:

  • Vaginas: Puedes escoger entre muchos tipos, pero te sugiero las de última gama, que contienen bombas de succión, perfectas para sentir tu pene presionado. La textura suave y movible de las paredes vaginales femeninas se nota muy bien en estas vaginas artificiales en un 90% de los casos, sólo tienes que seguir los consejos de lubricación y movilidad. Como es lógico, las artificiales se ensanchan y reducen a tu antojo, para recibir el gustazo dulce y bestial de la penetración.

Juguetes sexuales masculinos

  • Anos: Si te va mejor la relación sexual anal, o quieres combinarla con la vaginal, también encontrarás suaves culos artificiales en las tiendas de juguetes. Los lubricantes te garantizan la penetración al más resistente orificio de la mujer, además  de la ventaja de ayudar a fortalecer los músculos de tu aparato genital. Aunque algunos piensen que entre el ano y vagina femenina no hay mucha diferencia, en el caso de los juguetes es notable y podrás comprobar bien lo que es un culo apretado, casi virgen, y dispuesto para ti en todo momento.
  • Tetas: Los torsos femeninos son hoy  muy demandados entre los juguetes sexuales para hombres. Más grandes o más pequeños, la talla que elijas, con el tipo de pezón que más te de gusto, y sobre todo, con una consistencia total de pecho firme pero  suave al tacto, perfecto para ser manoseados y chupados. Vienen en formato pequeño si sólo quieres el pecho, o todo el torso si te interesa darle más autenticidad  a la fantasía sexual, tocando la espalda, la cintura y el talle. Y sí, ¡parecen reales!, una manera fenomenal de tener en casa a la mujer de tus sueños para gozar cuando quieras y donde quieras.

Todo lo anterior se cumple cuando adquieres una muñeca sexual completa, algunas vienen sin cabeza y son más baratas, pero, ¿acaso vas a prescindir de sentir a una mujer de verdad en tu cama? Si elijes a la muñeca, tienes todo en uno, vagina, culo y tetas, el máximo de los placeres para el sexo masculino en solitario.

¿Los debo usuar siempre? Bueno, eso queda a tu elección, pero te aseguramos que cuando estés bien caliente mirando los vídeos porno la gozada es máxima, porque unes lo real con lo imaginario y te lleva allá donde tú quieras.

Los beneficios y falsos mitos de tragar semen.
Los beneficios y falsos mitos de tragar semen.

Existen muchas opiniones sobre tragarse el semen de tu pareja después de la eyaculación. A algunos hombres les excita mucho que su pareja lo haga, a otros no tanto ya que lo ven una práctica sucia. A muchas mujeres también les excita mucho hacerlo y se sienten cómodas a otras les da asco o no se han atrevido a hacerlo por miedo a que les cause algún daño en su cuerpo o afecte a su salud.

Tragar semen, no es una práctica en absoluto peligrosa, siempre que el hombre no tenga ninguna Enfermedad de Transmisión Sexual (ETS), estas enfermedades no se transmiten practicando sexo vaginal o anal, pero al entrar en contacto el fluido con nuestra saliva puede transmitirse, por ello hay que tener confianza con tu pareja antes de poder ponerte en riesgo. Otra situación peligrosa es que la pareja sea alérgica al semen, no es muy común, pero existe una pequeña posibilidad.

Hay expertos que defienden que es sano y beneficioso tragar el semen, por lo que ha de hacerse con una frecuencia de dos veces por semana y otros que dicen que no con tanta asiduidad.

Podemos enumerar sorprendentes beneficios de tragar semen:

  •  Suaviza la piel; el semen contiene un antioxidante llamado espermina que contribuye a disminuir las arrugas.
  • Ingrediente de cocina; el semen no es solo nutritivo, según el chef Fotie Photenhauer el semen posee muchas propiedades culinarias y una textura maravillosa. hasta ha escrito un libro con recetas de cocina con semen.
  • Pigmento; el pintor alemán Martin Von Ostrowski presentó una serie de cuadros elaborados con su propio semen.
  • Antidepresivo para las mujeres: Algunos de los componentes del esperma, como el cortisol, la estrona, la melantonina o la serotonina, provocan una reacción hormonal que modifica el estado de ánimo.
  • Alivio de las náuseas matutinas: El semen podría curar las náuseas matutinas que afectan a mujeres embarazadas.

Aparte de estos beneficios, existen unos falsos mitos que se pueden desmentir:

  • Es tóxico e irritante, debido a que el contacto del semen con el ojo produce irritación se ha pensado que se trata de una sustancia perjudicial, pero el picor se va al rato.
  • El semen engorda,  contiene fructosa, pero la cantidad es tan pequeña que no engorda.
  • Es más beneficioso tragar semen que no hacerlo, cierto es que tiene propiedades muy beneficiosas, peor no puede utilizarse como excusa por el hombre para que su pareja se trague el semen.
  • No tragarse el semen de la pareja es símbolo de rechazo, es cuestión de sentirse cómodo . Cada persona es distinta y le gustará o no hacerlo, el olor y su textura pueden no ser apetecibles por muchas mujeres.

Lo principal es que sea una práctica sexual consensuada por los dos, el sexo aporta felicidad a ambas partes de la pareja, así que si no lo has probado, puedes hablarlo con tu pareja y poneros a ello para descubrir todos esos beneficios que puede aportar, o simplemente por el morbo y la excitación que puede causaros a ambos. Puede ser un buen preliminar antes del acto sexual, o se puede utilizar si no estáis muy seguros un preservativo como método de prevención. Todo depende de la pareja y hasta donde queráis llegar. Si quieres conocer otras opiniones, en este post tienes un listado de algunas que hemos encontrado por la red.

chica tragando semen

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masturbacion hombres

Todavía existen algunos mitos sobre la sexualidad masculina que llevan circulando por el imaginario popular durante centenas de años. Incluso, hoy en día que vivimos en un mundo hiperconectado que nos permite estar bien informados, tendemos a convertir en verdades aquello que nos cuentan y no aquello que sabemos ha sido estudiado y contrastado por fuentes expertas o de peso.

Aquí tienes una lista de 10 mitos sobre la sexualidad masculina y desmentidos de éstos extraídos del portal Salud Univisión:

  • Mito 1. El tamaño siempre importa
    Un estudio de la Universidad de Texas reveló que para más del 50% de las mujeres, el grosor del pene es más importante que su extensión. En promedio, el pene no erecto mide entre 2 y 4 pulgadas (8,5 y 10,5 cm). Erecto puede llegar a duplicar su largo.
  • Mito 2. Siempre tienen ganas
    Edward Laumann, profesor de Sociología en la Universidad de Chicago y autor de “Social Organization of Sexuality: Sexual Practices in the United States”, asegura que los hombres piensan en sexo al menos una vez al día. Pero eso no quiere decir que estén dispuestos a tenerlo a cada momento.
  • Mito 3. Los hombres no tienen punto “G”
    Según estudios del Centro de Salud de la Universidad de Alberta, no hay pruebas científicas de un punto “G” masculino, pero sí se sabe que hay zonas masculinas más erógenas como ciertas partes del escroto, y la piel entre el pene y el ano.
  • Mito 4. Cuando eyaculan se quedan dormidos
    Según la misma investigación de la Universidad de Alberta, no hay ninguna razón química para que esto ocurra. El imaginario social pesa fuerte en este mito, del “macho” que cae rendido ante su propio goce, explica el profesor Laumann.
  • Mito 5. No se masturban en una relación
    Aunque la frecuencia en la masturbación disminuye en hombres que están en una relación, el hábito no desaparece y, es más, en algunos casos profundiza los lazos íntimos del sexo. Un estudio de The Cancer Council Australia va más allá e indica que la masturbación baja el riesgo de cáncer de próstata.
  • Mito 6. Nunca quieren protegerse
    Las sexólogas Christina Lee y Glynn Owens consideran que, aunque popularmente es el hombre el que rechaza el uso del condón, hoy en día en el país cerca de 6 millones de hombres tienen al preservativo como su principal método anticonceptivo y de protección contra enfermedades de trasmisión sexual.
  • Mito 7. Buscan sexo fuera de la pareja
    Aunque los últimos escándalos políticos (léase Schwarzenegger, Weiner, Edwards) alimentan el mito, lo cierto es que, según estudios de la Universidad de Alberta, el porcentaje de hombres que recurren a prostitutas no es tan alto. A los compulsivos que buscan sexo fuera de la casa se los conoce hoy en día como “hipersexuales”.
  • Mito 8. Sólo se excitan con cuerpos perfectos
    Pueden fantasear con las modelos de las pasarelas, pero en la vida real, admiran partes del cuerpo en particular, y rasgos que van desde el buen humor hasta la capacidad de fantasear juntos, expresa la sexóloga Owens.
  • Mito 9. No quieren durante el embarazo
    Por el contrario, la que pone las reglas de juego durante el embarazo es la mujer. Un estudio publicado en la revista de la Asociación Médica Canadiense comprobó que, si el embarazo es de bajo riesgo, el sexo está permitido y hasta es bueno para el bebé.
  • Mito 10. El sexo termina a los 50
    Error. Algunos dirían que empieza lo mejor… un estudio de la Universidad de Chicago que investigó los hábitos sexuales de unos 3,000 adultos mayores (1,550 mujeres y 1,455 hombres) comprobó que tres de cada cuatro (es decir, el 73%) de los adultos de entre 54 y 67 años eran activos sexualmente.